miércoles, 21 de mayo de 2014

Pidió un poco de luz.
entendió que nada había cambiado,

                                                            Aurelio G Ovies





Me gusta el teatro y me gusta actuar, cambiar la vida aunque sea por un rato, meterme en la piel de personajes que no tienen nada que ver conmigo y procurar entender lo que sienten y piensan. Pero
 ayer después de actuar, que quede claro que no soy ninguna profesional, cuando volvía a mi vida real la mía, pensaba en esos actores y actrices que tanto admiro que viven entre  colorines y que nos parecen tan felices y pensé que no se diferencian para nada de cualquier otro trabajador Viven unas vidas  que no les pertenecen pero son seres humanos con sus miedos sus alegrías y sus soledades.
Amas de casa con los mismos problemas  que yo, con niños que criar, con padres que cuidar, algunos con apuros para llegar  a fin de mes cuando el teléfono no suena  para ofrecerles un papel. No sé  por qué  ayer  al volver a mi casa  me sentí más cerca  de esos actores que admiro, pero no por su trabajo sino porqué  entendí por un momento  que la vida no cambia por subirse a un escenario. Aunque a mí  para que negarlo, subir  de vez en cuando,  aunque no cambie nada  .....me gusta. Imagino que a ellos  también.
                                                         

1 comentario:

  1. Pues eso, como te gusta y ahora puedes, no dejes de hacer teatro. Nunca es tarde para hacer lo que a una le gusta, aunque sea después de jubilada.
    Además lo tienes mejor que los "profesionales" porque no tienes que tener la preocupación de vivir de eso. Un beso.
    Mari Nieves.

    ResponderEliminar